domingo, 4 de octubre de 2009
Viedma, Carmen de Patagones y lobería de Punta Bermeja
Desde Buenos Aires me trasladé en un bus nocturno, en categoría semicama, a Viedma. Nos han dado una cena con vino, café y güisqui y un desayuno por la mañana antes de llegar. El viaje duró unas doce horas.
Por la mañana me instalé en un hotelito y he permanecido en esta localidad tres días que he dedicado a vagabundear por las calles de Viedma y Patagones y fundamentalmente a visitar la lobería que se encuentra a 60 km de Viedma (60 km por estos caminos no tienen nada que ver con lo que uno está acostumbrado).
Como en esta época no hay transporte público para llegar he tenido que alquilar un coche en la oficina de Avis de Viedma. La oficina la gestiona Ariel, un individuo simpático y majete, buen conocedor crítico de la realidad cultural y política de la zona y que además de alquilarme el coche me ha proporcionado informaciones muy interesantes. El seguro ha sido a terceros con una franquicia de casi 1000 euros, excepto en caso de vuelco en el que no hay franquicia que valga, así que la conducción ha sido doblemente tensa.
Con el coche he cumplido el sueño de visitar la lobería, pero no he podido llegar a la caleta de los loros que era otro de mis objetivos. Sucede que la ruta de la costa es camino de ripio muy malo a partir de cierto punto y la conducción es realmente peligrosa y discurre por unos lugares por los que no transita nadie en muchos kilómetros a la redonda, al menos en esta época.
Añado algunas fotos (son jpg, procesados un pelín con una versión de Gimp, Gimp-portable y ejecutable desde disco externo; los RAW no los puedo procesar).
Los famosos loros de este trozo de costa. Desde la zona turística de el Cóndor, donde se encuentra el faro más antiguo de la Patagonia (o de esta zona, ya no recuerdo) hacia el sur, en un tramo de unos diez kilómetros, anida la colonia más grande de este tipo de loros. Tienen unos colores maravillosos y no callan nunca:
Loros barranqueros:
La lobería:
Por el camino de la costa (choique):
Por el camino de la costa:
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario